Aerotermia en pisos antiguos con radiadores: temperatura de impulsión real, consumo y soluciones

La aerotermia está revolucionando la climatización en España, pero cuando hablamos de pisos antiguos con radiadores tradicionales, surgen muchas dudas: ¿funcionará la bomba de calor? ¿Qué temperatura de impulsión necesito? ¿Cuánto consumirá realmente? ¿Hay que cambiar todos los radiadores? En este artículo, resolvemos estas preguntas con un enfoque práctico y realista, pensado para quienes quieren renovar su calefacción sin hacer una reforma integral.

Si buscas una visión general sobre la combinación de aerotermia y radiadores, te recomendamos leer primero nuestro artículo: Aerotermia con Radiadores: Cómo funciona, consumo y precio. Aquí nos centramos en los retos y soluciones específicas para pisos antiguos.

1. Diagnóstico del sistema de radiadores existente

Antes de plantear la instalación de aerotermia, es fundamental analizar el sistema de radiadores del piso:

• Tipo y tamaño de radiadores: Los radiadores antiguos suelen ser de hierro fundido o aluminio, con gran inercia térmica y diseñados para trabajar a temperaturas de impulsión elevadas (70–80 °C).
• Superficie de intercambio: Cuanto mayor sea la superficie de los radiadores, más fácil será obtener calor suficiente a temperaturas más bajas.
• Estado de la instalación: Es importante revisar el aislamiento de tuberías, la presencia de válvulas termostáticas y el estado general del circuito.

Conclusión: No siempre es necesario cambiar todos los radiadores, pero sí conviene evaluar si su tamaño y disposición permiten trabajar a temperaturas de impulsión más bajas (45–55 °C).

2. Curvas climáticas y temperatura de impulsión real

La clave para que la aerotermia funcione bien con radiadores en pisos antiguos es ajustar la temperatura de impulsión según la demanda real y la temperatura exterior. Esto se consigue mediante la curva climática:

¿Qué es la curva climática?

Es una programación que adapta la temperatura del agua de impulsión a la temperatura exterior. Por ejemplo, a 0 °C en la calle, la impulsión puede ser de 55 °C; a 10 °C, puede bajar a 40–45 °C.

¿Por qué es importante?

Cuanto más baja sea la temperatura de impulsión, mayor será el rendimiento (SCOP) de la bomba de calor y menor el consumo eléctrico.

¿Qué temperatura necesito realmente?

En la mayoría de pisos antiguos bien diagnosticados, se puede trabajar entre 50 y 60 °C en los días más fríos, y mucho menos el resto del año. Solo en olas de frío extremas puede ser necesario llegar a 65 °C, pero esto es puntual.

3. Opciones de adaptación: radiadores, fan-coils y apoyo eléctrico

a) Radiadores de baja temperatura (LT):
Si los radiadores existentes son grandes o se pueden ampliar, es posible mantenerlos y trabajar a temperaturas de 45–55 °C. Si son pequeños, se pueden sustituir por modelos de baja temperatura, que ofrecen más superficie de intercambio.

b) Fan-coils:
Son emisores que funcionan perfectamente con agua a 35–45 °C y pueden aportar frío en verano. Son una opción interesante si se quiere aprovechar la aerotermia para refrigeración.

c) Apoyo eléctrico puntual:
En los días más fríos, se puede programar un apoyo eléctrico (resistencia) para cubrir picos de demanda sin sobredimensionar la bomba de calor. El consumo extra es puntual y no penaliza el ahorro anual.

4. Simulación de consumo y SCOP por zona climática

El rendimiento de la aerotermia (SCOP) depende de la temperatura de impulsión y del clima local. Veamos una simulación orientativa para un piso antiguo de 90 m² en tres zonas climáticas españolas:

Valores orientativos para vivienda bien aislada, radiadores adaptados y uso de curva climática. El ahorro real depende del precio de la electricidad y del gas.

5. Casos reales y gestión del ruido

• Caso 1: Piso de 80 m² en Madrid, radiadores de hierro fundido, impulsión máxima 55 °C, SCOP real 3,4, ahorro anual 45% frente a gas natural.
• Caso 2: Piso de 100 m² en Valencia, radiadores de aluminio ampliados, impulsión media 48 °C, SCOP 4,0, ahorro 60%.
• Caso 3: Piso antiguo en Burgos, radiadores pequeños, se sustituyen por fan-coils en salón y dormitorios, impulsión 40–45 °C, SCOP 4,2, confort en invierno y verano.

¿Y el ruido?
Las bombas de calor modernas (como ecoAIR+ de Ecoforest) son muy silenciosas. El ruido exterior es similar al de un aire acondicionado inverter y, en interior, el sistema hidráulico no genera molestias si está bien instalado.

6. Conclusiones y recomendaciones

• La aerotermia es perfectamente viable en pisos antiguos con radiadores, siempre que se realice un diagnóstico profesional y se adapte la instalación.
• La clave está en trabajar con temperaturas de impulsión lo más bajas posible, usando la curva climática y, si es necesario, ampliando radiadores o combinando con fan-coils.
• El consumo y el ahorro dependen del clima, el aislamiento y el ajuste fino del sistema.
• Consulta siempre a un instalador homologado y apuesta por equipos modulantes y eficientes.

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Preguntas frecuentes

¿Tengo que cambiar todos los radiadores?

No siempre. Si son grandes y el piso está bien aislado, pueden servir. Si no, se pueden ampliar o sustituir por modelos de baja temperatura.

¿Qué pasa en los días más fríos?

Se puede programar un apoyo eléctrico puntual o subir la temperatura de impulsión temporalmente, sin penalizar el ahorro anual.

¿Puedo usar la aerotermia para refrigerar?

Sí, si instalas fan-coils o suelo radiante/refrescante.

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